El mundo está cambiando más a prisa de lo que nos imaginamos. Estamos en una importante encrucijada que definirá el destino de la humanidad y de muchas especies que cohabitan con nosotrxs el planeta que nos da cobijo.
Este cambio constituye un desafío de enormes repercusiones pues se trata de una transformación dentro de la estructura profunda que delinea el paradigma que sostiene la visión del mundo que configuran las creencias, valores, principios relaciones socio-económicas y políticas que forman el sustrato esencial del modelo Cartesiano que surgió a finales del Siglo XV.
La crisis ambiental es resultado de la crisis civilizatoria, las contradicciones que estamos hoy viviendo son los síntomas de un paradigma que ya no es capaz de ser sostenible y, por lo mismo, todos los actores que estamos metidos en este escenario global, corremos el enorme riesgo de ser testigos presenciales de un colapso socio-ambiental de proporciones apocalípticas. La civilización occidental, en su inevitable caída, es capaz de recurrir al guion contenido en su libro fundacional donde se establece el juicio final como el destino obligado para toda la humanidad.
Necesitamos recurrir a la movilización consciente, al llamado del fuego del corazón que está hoy moviendo a millones de personas que cada vez más se enlazan para no permitir que el Armagedón ocurra, por ello es necesario que acudamos a los llamados que fomentan la generación de comunidades que se involucran para recomponer el tejido socio-ambiental.
En el Huerto Roma Verde estamos siendo parte de los Altares Espejo, que elevan el rezo para que los pueblos originarios puedan lograr que el conocimiento ancestral emerja del abandono y el olvido con que el racionalismo y colonialismo lo sumió, por lo que hoy es importante darles voz, espacio y dimensión a la palabra florida de los abuelos y de las abuelas que han sido guardianes de las tradiciones que se entretejen con los rumbos, con las esencias y con el respeto a todas las manifestaciones vivas y no vivas que surgen y habitan en el vientre de la tierra.
En el mes de febrero, el día 10 estaremos elevando un rezo para que el pueblo de Palestina encuentre paz y justicia con dignidad, que pueda salir de la barbarie genocida a la que por varias décadas a sido sometida por los poderes occidentales que han visto su tierra como un factor geopolítico que obedece a los intereses de un puñado de naciones que son las grandes beneficiarias del Paradigma Cartesiano que necesita de manera urgente seguir expoliando recursos naturales, sometiendo pueblos y disolviendo comunidades para que un grupo reducido de individuos y corporaciones mantengan sus privilegios.
El 10 de febrero se presentará en las instalaciones del Huerto Roma Verde un concierto por Gaza, donde tendremos el gusto de recibir a músicos extraordinarios como: Lengualerta y Zambrano, Leticia Servin, Ampersan, Huaira & Captures y también con un happening sensorial efectuado por Sensorama y con la intervención de Témoris Grecko quien dará una explicación sobre la situación que prevalece en el Medio Oriente.
Cabe resaltar que todos los recursos que se obtengan de taquilla, barra y productos que se vendan, serán donados a Médicos Sin Fronteras, quienes destinarán ese recurso para palear la grave situación del pueblo Palestino.
¡Les esperamos!
T-LÍA (Texto Libre de Inteligencia Artificial)